Un antibiótico podría revolucionar el tratamiento del ictus

El antibiótico minociclina podría revolucionar el tratamiento de los ictus, según un estudio de la Universidad de Florida del Sur en Estados Unidos que se publica en la revista 'BioMed Central Neuroscience'. El estudio describe la seguridad y eficacia terapéutica del fármaco en modelos animales.

Según explica Cesar V. Borlongan, responsable del estudio, "hasta la fecha, el agente trombolítico tPA es el único fármaco eficaz para el ictus isquémico agudo, sin embargo, sólo alrededor del 2 por ciento de los pacientes con ictus isquémico se benefician de este tratamiento debido a su limitada ventana temporal terapéutica".

El investigador explica que existe una necesidad imperiosa de desarrollar métodos neuroprotectores adicionales. Esta investigación es un importante paso para rectificar los problemas de tratamiento, presentando un tratamiento más eficaz para los pacientes de ictus.

Durante un ictus, un coágulo sanguíneo detiene el flujo sanguíneo hacia el cerebro, lo que puede tener amplias consecuencias a largo y corto plazo. El estudio registró el efecto de la minociclina intravenosa tanto en neuronas aisladas como en modelos animales después de un ictus inducido experimentalmente.

A bajas dosis el fármaco tenía un efecto neuroprotector sobre las neuronas al reducir la apoptosis de las células neuronales, el suicidio al que se someten las propias células, y en la mejora de los defectos conductuales causados por el ictus.

Según concluye Borlongan, "la seguridad y la eficacia terapéutica de dosis bajas de minociclina y sus fuertes efectos neuroprotectores durante el ictus isquémico agudo lo convierten en un fármaco candidato para la terapia del ictus. Un estudio en fase I que han puesto en marcha los Institutos Nacionales de Salud de los Estados Unidos está explorando ya el uso de la minociclina intravenosa para tratar el ictus isquémico agudo".
Fuente: adn.es
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